Descripción

Este trabajo estudia las presiones migratorias asociadas al cambio climático y da luces sobre su posible evolución a medida que el clima se degrade aún más en el futuro. Comenzamos el análisis con un enfoque narrativo de cuatro eventos históricos. Documentamos que disrupciones climáticas severas en el pasado han estado asociadas a fuertes éxodos migratorios, gatillados por conflictos sociales, violencia y, en algunos casos, colapso social. Luego, trasladamos el análisis al presente. Estimando un modelo con datos de panel para 154 países entre 1990 y 2020, encontramos una relación muy significativa y no lineal entre el cambio climático y la migración, con forma de U alrededor de una “temperatura óptima”. La no linealidad es más fuerte en los países más pobres. De hecho, a pesar de que las zonas climáticas tropicales han experimentado el menor aumento de temperatura hasta ahora, exhiben el mayor aumento en la migración hacia el exterior debido a su temperatura inicial más alta y su menor PIB per cápita (lo que limita la adaptación). Finalmente, utilizamos el modelo estimado para proyectar la migración futura bajo cinco escenarios del IPCC y para un escenario de tipping point (colapso de AMOC). Encontramos efectos moderados sobre el aumento de la migración en escenarios climáticos moderados, pero esa migración se duplica para las áreas tropicales en el escenario más extremo. En el escenario del colapso de AMOC, donde las regiones cercanas a los polos se congelan, encontramos efectos mucho mayores, con una migración mundial impulsada por los países con climas fríos y templados. Conjeturamos que nuestros resultados constituyen una cota inferior de los posibles efectos, dadas (i) las no linealidades no bien capturadas por la data del presente y (ii) la posible caída de los ingresos futuros debido a los daños climáticos que limitan la adaptación.